Dia 9 de Octubre 2010
Category: | 0 Comments

Trabajos realizados por fantásticos creadores y tuve el placer de compartir junto a ellos unas pequeñas excursiones por la ciudad de MADRID, (entre otras actividades)... Es increible los maravillosos, maravillosas artistas de los que estamos rodeados y cuán grandes diferencias existen entre los que pueden dedicarse a crear y crear por disponer de espacios, conocidos, familiares, un buen respaldo economico y sin temor alguno a tener que subsistir, y aquellos que no llegan a poder ni malvivir por medio de esa fuente que tan estrepitosamente fluye ante la más mínima ocasión. He tenido el placer de visitar tres exposiciones totalmente diferentes, de pintura, temás muy diferentes, Realmente bellas, todas con un elemento en común, un mismo estatus social, donde el problema económico no existe. Nada que ver con mi fotográfa favorita, MERCEDES RODRIGUEZ, que lleva treinta años subsixtiendo, aprendiendo, y trabajando duro, a la vez que estudiando, para solo sobrevivir, sin poder permitirse el lujo de llevar a exponer muchas o algunas de sus obras.
He rescatado del portaretratos la imagen de una joven, que por entonces tenía 18 años, (-¡aquellas bellas fotos de los años cuarenta!), para fusionar el azul del cielo con el de sus ojos, tranparentes, y hermosos, tanto o más como lo es la plenitud de una juventud lejana. Tan bella, como orgullosa, arrastró toda su dignidad hasta el fin de sus días, luchadora , sobervía como fuerte y una gran superviviente de aquellos trágicos años que se vivieron en este país llamado España. De su tronco, brotaron cuatro ramas, de las que otras siete realzaron aún más su árbol. Y, de nuevo resurgen unos ojos azules intensos como el cielo y el mar unidos en el pequeño tallo de otra nueva generación. 