Author: MAYA on
martes, 21 de junio de 2011
Miles de veces he pasado por Virgen del Puerto, delante de la verja de los jardines Del MORO tendido a los pies del Palacio Real.
Por la calma con la que paseaba y respiraba bajo una temprana tarde de Junio, me paré ante ella y entre los árboles y arbustos algo llamó la atención, vi algo que no era una persona, una figura que se desplazaba a lo lejos, acercándome a los barrotes pude ver que era un cisne negro sobre el agua del estanque al que jamás tuve el gusto de conocer o apreciarlo hasta hoy.
En los últimos días de la primavera del 2011, el Sol anuncia la fuerza de sus destellos, más el sabor de las venideras siestas se dejan sentir entre las ramas que me invitaron saludar a los dos Cisnes que alli encontré.
Category: |
Author: MAYA on
jueves, 16 de junio de 2011
Pura improvisación, una vez más. No me importa, aunque sí desearía relatar una larga historia con un argumento y documentación adecuada sobre cada una de las vivencias, ideas, conceptos y teorías que, fugaz como una cometa, se desliza por mis sentidos; otra muy diferente el encauzar con un " cierto orden" la almalgama de tantos elementos acumulados , y retocediendo a lo más recientemente , una hartada de desatinos acontecen, ¿o quizá es lo único correcto que ha de pasar, para que se sucedan otra cadena de ellas??'
La subjetividad, el indivíduo, su libertad, la que unos defienden, las que otros mancillan, los conceptos abruptos que usamos para una generalización, ese escudo invisible que nos tapa la miserable cara reflejada ante un espejo que cruje ante la más grande de las hipocresias. El temor de recibir, ya no un daño físico, sino ese otro, ese daño moral que rompe el alma, ese alma que no existe pero que sentimos como ráfaga que te sacude hasta el último poro de las entrañas. Y sí, digo entrañas, porque los de la piel han muerto,. Todos esos chascarrillos tronando por doquier, sin querer prestar atención a una descolocada razón, busca su lugar, lo tiene, más las negras sombras tapán a veces su resplandor.
Las fuertes y esbeltas columnas que soportan el Viaducto, sus arcos fornidos protegen durante la noche a aquellos indingentes que se guarecen bajo su techo. Hoy soy capaz de ver su fortaleza cual frágiles cristales se transforman en la retina de mis sueños.
Category: |
Author: MAYA on
martes, 14 de junio de 2011
Después de una sábado intenso, el domingo no lo fue menos, otro escenario, en medio de los campos cuyo horizonte se plegaba entre las montañas de Gredos
. Aún a pesar de las fechas y en las puertas del verano la temperatura es agradable y bajo la parra llena de panzas o cunas donde dormitan los gatos sobre la tierna techumbre, se dispuso la mesa para el almuerzo mientras el persistente zumbido de las abejas entonaban el aviso de su gran cercanía. El temor de uno de los visitantes a ser picado por una de ellas, le llevó a la solución más rápida, echarlas del lugar como fuera (instinto humano, te mato y así no molestas) se dirigió con un spray
insecticidas
hacía ellas. Fue superior a mí, hasta mi memoria acudió el documental de las Águilas americanas, extinguidas por el TDT
, ahora también están e peligro no solo las abejas, sino cientos y cientos de otros¡ minúsculos y diversas especies de toda clase de animales. Me enfrenté a tal desaguisado y dos argumentos se encontraban frente a frente, Un riesgo de ser picados por ellas, su efecto nocivos ante una posible alergia, o el ser picados por no sólo una sino varias, ante esta posibilidad, primero LA PERSONA, SI al insectidida
. Otro argumento, impregnarte de una loción repelente y si vienes hasta el campo de visita deja a sus habitantes como están. ¿Venimos al campo a destrozar la naturaleza?... ( Es evidente que sí, esto es lo que sucede diariamente en cualquier punto, cualquier persona del asfalto, o no asfalto, creyéndose muy por encima de otro elemento vivo inferior a él, puede derrocarlo
, por que sí. Donde vivo esto sucede desde la concejalía de MEDIO AMBIENTE, éste en vez de protegerlo, día a día se carga cientos y cientos de animales que subsisten entre las flores silvestres y demás hierbas que afloran en los parques asilvestrados del municipio. Ya no son las primeras amapolas de la recién nacida primavera, sino cada vez que resurgen el tractor arrolla todo a su paso, desde aquella primera vez en la segunda semana de Abril, , hasta hoy ya son cuatro veces las que han sido sesgadas. Otra cosa es segarlas cuando se secan para evitar posibles riesgos de fuego.
La incongruencia es de tal envergadura, que por puro agotamiento moral uno se retiraría del mundo , (si ello fuera posible, al menos sin ese sentimiento de estar atrapado en una red como en la que caen tantas especies en el mar y...).
Category: |
Author: MAYA on
miércoles, 1 de junio de 2011
Category: |